Por Carlos Pérez
Tras la formalización de su histórica colaboración, Laguna y SOMA México han presentado los detalles exhaustivos de la exposición nacional de artes visuales que marca el punto cúlmine de su alianza para el ciclo “Contar los pasos para medir una distancia”. Esta muestra, que funge como la exhibición final de la Generación 2025 del Programa Educativo de SOMA, se instala en el espacio de Laguna para ofrecer un panorama multifocal de las inquietudes, procesos y metodologías de un grupo de doce artistas emergentes.

La exposición colectiva, que se presentará del 4 al 24 de octubre, es el resultado tangible de un periodo de intensa reflexión y experimentación, y se sostiene sobre la producción de Elvira Acosta, Mario Alberto Bravo, Antonio Castillo, Samara Colina, Yatiní Domínguez, Daniel C. Fernández, Fernanda Farjeat, Andrés Guadarrama, Alejandro Olazo, Susana Oliveros Amaya, Alma Camelia y ERISH, quienes integran a la generación 2025 del Programa Educativo SOMA. Sus obras, al operar como nodos de un diálogo extendido, buscan establecer las medidas y los trayectos —tanto físicos como conceptuales— que definen la práctica artística en el contexto mexicano actual.
La trascendencia de “Contar los pasos para medir una distancia“ se amplifica con un programa público diseñado para activar la participación y el pensamiento crítico fuera de los límites de la obra en sala. Este calendario de eventos se perfila como un laboratorio de convivencia e intercambio que atraviesa temáticas que van desde lo confesional hasta lo editorial y lo performático:
El 4 de octubre, de 16:00 a 19:00 horas, se celebrará el encuentro “Stop, declaro la guerra en contra de mi peor enemigo que soy yo”, bajo la guía de Carolina Berrocal. La sesión propone una dinámica de confesiones colectivas orientada a desentrañar los nudos de conflicto íntimo que inherentemente atraviesan los complejos procesos creativos.
De las 12:30 a 16:30 horas, el 11 de octubre el foco se moverá hacia la esfera de la edición y el mercado con la presentación de la publicación “¡Cambio, vendo y compro! ¡Compro, vendo y cambio!”, a cargo de sus autores, Vivian Abenshushan y Nicolás Pradilla.

Mientras que la jornada “Naranja dulce limón partido“ —enmarcada como un miércoles de SOMA—, la curadora Sofía Olascoaga convocará a una degustación de proximidades y fricciones entre las piezas expuestas. La sesión que se llevará a cabo el 15 de octubre de 19:00 a 21:00 horas culminará con la preparación de una “exposición” efímera a partir de la mezcla y experimentación con doce ingredientes concretos, funcionando como una potente metáfora sobre la mezcla de afectos y tensiones en el arte.
El 17 de octubre de 15:00 a 18:00 horas) el público podrá disfrutar de una descompresión colectiva en el “Club Massage“, conducido por So Cabrera, planteado como una instancia abierta de convivencia distendida, relajación y “chisme” necesario para la digestión cultural.
El cierre de esta significativa exposición, pautado para el 24 de octubre a partir de las 17:00, contará con un evento de clausura que promete ser inolvidable. De 20:00 a 22:00 horas, Piolinda Marcela liderará “Contar los papelitos para medir una panza: Clausura”, una ceremonia que fusiona el adiós a la muestra con la celebración de un baby shower. Mediante música y juegos, el evento opera como una metáfora vital de despedida y bienvenida a los nuevos ciclos y promesas del arte.
Esta producción nacional de artes visuales cuenta con el respaldo de instituciones como altex, TAJO y se realiza bajo el estímulo fiscal del artículo 190 de la LISR, vía EFÍARTES, lo que subraya la solidez institucional y la relevancia del proyecto.
La unión de Laguna y SOMA no solo ofrece una plataforma a nuevas voces, sino que establece un diálogo programático robusto y diversificado, indispensable para la cartografía artística del país. La muestra y las actividades de realizarán en Dr. Lucio 181, Doctores, Cuauhtémoc, 06720 Ciudad de México, CDMX